PLEGARIAS PARA UNA NIÑA DESHUESADA


Hay algo que se repite en cada una de nosotras y es que ya desde niñas, soñamos siempre con el príncipe azul.
A los cinco años, tenés tu Barbie y tu Ken, a los que le celebrás matrimonio a diario. Ella, radiante con su vestido de novia blanco; él, vestido en jaquet, con su melena rubia al viento y sus dientes blancos relucientes. Es el mejor día de sus vidas y vos creés que a los veintiuno (cuando seas re-grande), tendrás también tu boda soñada.
Alos diez, te soñás Paty Mayonees, siendo amada en secreto por Doug Narinas, dispuesto a hacer cualquier cosa por conquistar tu amor. No te interesa que sea pelado y huevón y que encima tenga conversaciones con un perro.
A los trece, envidiás a tu amiga que se puso de novia con “él”, ese chico que una vez la invitó a tomar un helado (pero su mamá no la dejó ir) y hace poco, se atrevió a caminar con ella de la mano.
A los quince, y justo para tu cumpleaños con fiesta y vestido incluido, estás de novia con el que creés será el amor de tu vida. No perdés la oportunidad de bailar el Vals junto a él, de sacarte mil fotos y de no despegarte ni un segundo en toda la fiesta de tu primer novio. Vestido de traje y chaleco gris topo, ahora te morís de ternura, pero te querrrás morir cuando al mes lo dejes porque te des cuenta de que es un nabo y veas el video de tu fiesta en el que él aparece aún más que vos, bailando al ritmo de La Isla del Sol. Un zapato.
A los diecisiete, te vas de viaje de egresados. Esta vez estás de novia hace un año y medio. Le jurás que te portarás súper bien y así lo hacés: chateás con él todos los días, volvés del boliche a la una y media de la mañana y hasta dormís la siesta en Bariloche, cual jubilada en pleno viaje a Las Toninas. Un año más tarde, el que se va de viaje de egresados es él, que es más grande que vos pero repitió dos veces. También te jura y perjura que se portará como un duque, pero lo cierto es que putanea a más no poder y a la vuelta te deja. Sos la más cornuda de la comarca. Un bajón.
A los diecinueve, ya terminaste el CBC y empezás la facu esperando encontrar un compañero intelectual, buena persona, fiel, leal, estudioso, divertido y fachero.
A los veinte, te das cuenta de que los hombres en la facultad escasean. Al 60% no los tocarías ni con un puntero láser; el 20% son gays; el 15% son ñoños y el 5% dable, por supuesto está casado.

Así que aquí nos encontramos. Veinte, veinticinco años después de que nuestra madre nos diera a luz. Hemos vivido aproximadamente un 25% de nuestras vidas y transitado por diversos estadios en lo referente al amor. Aquí vale la pena hacer un parate e imaginar el futuro. Cualquier vida normal, continuaría así:

A los veinticinco, empezás a salir con un pibe simpático, sólo porque tu amiga que estaba de novia quería tener una pareja amiga con quien salir. El flaco te empieza a caer bien, aunque es medio goma.
A los veintisiete, la relación continúa. No es nada descomunal, pero creés que ya es tarde para empezar a buscar machos…a esta edad, la mayoría ya está encaminada al altar. Al fin y al cabo, algo de cariño le tomaste al muchacho. Y tienen relativamente buen sexo.
A los veintinueve, Carlitos te pide matrimonio. Vos te das cuenta de que ya estás en edad de sentar cabeza y aceptás.
A los veintinueve y medio, cinco meses antes del casamiento, Johny, tu amor del secundario (sí, el que era más grande que vos pero había repetido dos veces), reaparece en tu vida. En una noche de borrachera, tenés el mejor sexo de tu vida y el pibe, que en realidad ya tiene más de treinta, te pide que no te cases con Carlitos, confesándote que él siempre soñó formar una familia a tu lado.
A los treinta, te casás. Con Carlitos, por supuesto.
A los treinta y dos, tienen un hijo, al que llaman Carlitos Jr.
A los treinta y cinco, le confesás tu aventura prenupcial. Él te dice que siempre lo supo, es más, que el mismo Johny se lo dijo, pero como te ama sideralmente, consideró que si a vos te había hecho bien, entonces a él también.
A los treinta y cinco y dos minutos, te das cuenta de que te casaste con un pelotudo.
A los treinta y seis, te divorciás.
A los treinta y siete, conseguís el teléfono de Johny y, con la excusa de armar una fiesta por los veinte años de tu egreso, lo llamás. Te atiende el hijo, de cinco años y te dice que el papá está durmiendo. Vos, sin alterarte, enseguida pensás: “bueno, yo también tengo un hijo de cinco años, quizás se hay divorciado o sea infeliz junto a su mujer”. Pero no. El pibe te pasa con la mamá, que en realidad estaba ocupada cambiándole los pañales a los mellizos recién nacidos y preparando malteadas con leche para toda la familia, que se había reunido en su casa de campo de fin de semana a jugar al criquet. Cortás.
A los cuarenta, empezás a frecuentar el Golden con un par de amigas divorciadas y otra solterona.

Es hora de pensar si es esto lo que queremos para nuestras vidas…
Yo digo que no, no, no y no.
Aprovechemos ahora, estamos en la edad de llevarnos la vida por delante. Vivamos la vida, disfrutémosla, descontrolémosla. No nos bajoneemos si no aparece el príncipe azul, no nos conformemos con cualquier Carlitos que se nos cruce en la vida.
Busquemos huesos, buenos huesos y vivamos grandes momentos.
No nos subestimemos, la vida es larga y ya va a aparecer un compañero de ruta para el resto de la vida. Pero éste quizás no sea el momento.
No te preocupes si estás deshuesada, tenete fe y sentite una Diosa. La confianza empieza por una misma.

Por eso esta noche, cuando te vayas a acostar, rezá un Padre Nuestro y pedí: “Ay, Diosito Santo, bajame ya un Hueso…van pasando los años y todavía lo espero!”

Manjula
Post dedicado a Chuletas, compañero inseparable del grandioso Doug Narinas.
Du-du-du-du-du-ru-du-du-du-ru-du

12 comentarios:

Anónimo dijo...

geniiiallll!!!

arriba los huesosss!!! queremos una vida donde podamos romper todoo!!
esto es lo que llamo un post pum para arriba!! me da en que pensar... no, no, no... nada relacionado con mi situación actual...
manjula! lo has hecho de nuevo!
saludos!

Anónimo dijo...

romina sinhueso
simplemente sensacional, soy fanatica. ayer aparecio mi hueso de dos años y la ultima vez q lo vi quedo todo mal por un mal episodio sexual. ademas lo vi con la novia en el super y me re embole pero hice cara de ahh donde me meto quiero ser un topo. justo que ayer leo de nuevo todo el manifiesto buenhuesista estoy llena de esperanzas que este año se viene con todo y con buenos huesos a punto de llegar para todas (en especial para las boludas que se enganchan, no babachas!)tengo fe en hacerme mas huesa dura de roer.

Anónimo dijo...

ah a mi hueso ese de dos años de antiguedad no le di bola porque ademas de corto es creido q es lindo y se debe querer empomar otras, no le basta con la novia. yo me siento esplendida, estoy saliendo con uno cuatro años mas chico q yo y la verdad que es sensacional. brindo por un 2009 lleno de buenos y dignos huesos!!

Anónimo dijo...

Excelente!!!

Soy de las que me suelo enganchar...Ahora cuando me pasa eso me dedico a leer el blog y así poder entrar en razón y ver las cosas como realmente son!

Anónimo dijo...

Todos en algun momento estamos en estado de 'deshuesados'...
El tema es no dejar que eso se nos haga costumbre.
Salgamos a romperla en busca de nuevos huesos!
Y adios los Carlitos, nada de conformarse con poco!
saludos!
hasta pronto.

Anónimo dijo...

Hemos perdido lectores, hay que recuperarlos.

Difunda este Blog!

Que nadie quede al margen del mundo huesístico

Anónimo dijo...

Cosa curiosa esto de los huesitos...: en mi condicion de macho rovoltoso, debo aceptar el no saber donde encasillarme---¿ sere el carlitos o el johny?,, o pior los dos?
Lo mas curioso es lo asinncronico de los sexos... mientras nosotros buscamos incesantemente -- huesitos-- durante toda nuestra juventud,(lease hasta casi 50), ustedes lo hacen despues de varios fracasos amorosos.... ¿ y si nos enc0ontramos en la mitad y lo pasamos barbaro ajjajajaj..
un besito , muy bueno el blog--(salsipuedes)

Arle dijo...

Ex-ce-len-te. Me estoy dando cuenta que hice todo al revés. Primero tuve un hijo, después me casé, un año después me divorcié, compartí nueve años con uno y siete con otro exmarido, y ahora tengo abierta la lista de pases para que los próximos huesos que se me crucen, sean masticables, sin rollos y saludables.

Besos descarnados !

Nati Alabel dijo...

Doug! cada, cómo me gustaba esa serie! De verdad, qué mal me hicieron las Barbies y todas esas giladas que me indicaban que tenía que ser delgada, rubia, y casarme a los 21...

Unknown dijo...

hace tres anio que voy y vengo con mi huesito... pero la semana pasada me entere que estaba saliendo con otra flaca... asi que con bronca fui y busque a mi huesito de cuando tenia 15 anios!!!

Anónimo dijo...

A los treinta y cinco y dos minutos, te das cuenta de que te casaste con un pelotudo.
EXCELENTE siempre me sacan una sonrisa chicas! Son unas idolas!

Anónimo dijo...

jajajajajjaa!!!!!

idolaaaaaaaassssssss!!!!!!!!!!

solo x ustedes....saldre YA en busca de algun hueso encantador!!!

natalia pseudoperuana!

Publicar un comentario

Gracias por participar y por favor, sean respetuosos. ¡A Huesear se ha dicho! El equipo de MBH.


MBH 2013.Copyright. Diseñado por MBH. Original de Design Disease. Soportado por Blogger.

Todos los derechos del presente sitio están reservados y corresponden a sus autores. Solo ellos tienen derecho al uso y distribución de su contenido, que se encuentra protegido por la legislación nacional e internacional vigente sobre propiedad intelectual